Lucia Meza y su discurso que no emociona, no impone, no impacta, no genera interés

#MonitoréameEsta

Por: Verónica Bacaz

Unas amigas gemelas a las que conozco de hace tiempo, acudieron por acarreo a la Entrega de Constancias del PAN en Cuernavaca a sus próximos candidatos y candidatas a cargo de elección popular el domingo pasado, cuando terminó el evento les pregunté que si pusieron atención al discurso de Lucia Meza la candidata a gobernadora, ambas me dijeron ¡no! Ni la vimos.

Pensé que había sido mi percepción porque desde que Lucia Meza había actuado de manera incongruente, es decir, “con ambición por el poder” y se pasó de Morena al PRI, PAN y PRD, no terminó de convencerme su propuesta y decidí no dar cobertura a sus eventos (a parte de que no me invitan).

Incluso cuando me llegaban sus convocatorias a ruedas de prensa, llegué a cubrirla y no me checaba su actitud, su discurso leído, unas veces amó al fiscal Uriel Carmona y otras más lo atacó.

Pero no, ni las gemelas ni yo pusimos atención en su discurso porque no nos enganchó, no captó nuestra atención, es lo mismo de siempre, la misma narrativa y siempre con ayuda o del telepronter o de unas tarjetas blancas.

No habla de sus resultados como senadora, no aporta proyectos que haya impulsado como diputada local o que pudieron prosperar, ni como regidora de Cuautla. Solo se dedica a atacar al gobierno de Cuauhtémoc Blanco, no tiene otra narrativa.

Y a qué viene esto, si bien no simpatizo con el Frente por no haber buscado un mejor perfil; el exgobernador Graco Ramírez llegó a tener discursos que imponían, durante su campaña, que causaban cierta esperanza de cambio –que después en los actos incurrió en corrupción es otro rollo-, pero la verdad es que no veo que Lucia Meza se impongan en los escenarios.

Ayer, lo que llegaba a arropar su escaso discurso, era que al unísono cada vez que nombraba al gobernador Cuauhtémoc Blanco, los militantes y candidatos vitoreaban ¡Fuera! O bien cuando la presentaban o se despedía coreaban ¡Gobernadora! Pero ya, no aportó más, no causó interés, muy aguado sin impacto.

Lo único que atrajo mi atención fue el costoso outfit que portaba la diputada local, Andrea Gordillo, sus stilettos Jimmy Choo Rosalía color beige de más de 19 mil pesos, el lujoso reloj Cartier Pantherê valorado en más de 190 mil pesos, un cinturón Salvatore Ferragamo de 10 mil pesos. Más de 200 mil pesos valía todo el look de la joven legisladora, se veía regia.

Bueno, hasta puedo decir que los discursos de Andre Gordillo han causado más aplausos en el recinto de Gándara cuando le tira al gobernador y se impone en la tribuna.

El propio José Luis Urióstegui (candidato también del PAN) cimbró la explanada del Palacio de Cortés o el Museo de los Pueblos de Morelos, cuando acomodó dos o tres llegues al Ejecutivo, producto del distanciamiento que han tenido o bien cuando dijo “¡Yo no me venzo! La adversidad me estimula y obliga a la disrupción y a la deconstrucción para generar nuevas ideas, retos y rumbos para alcanzar los mejores resultados y lo estamos logrando”.

En fin, creo que los asesores de Lucia Meza deberían considerar prepararle mejores propuestas de proyección e interacción con multitudes, la sonrisa colgate no es suficiente, tampoco el enseñar pierna y otros asuntos que son notorios en sus redes para atraer al público masculino. Ya lo ha hecho varias veces.

Hoy, se requiere convencer a la gente, los cambios con los mismos actos de ‘Guerra Sucia’ ya no checan, es más, en el argot de las redes esas actitudes de ataques de una mujer a otra mujer simplemente son canceladas.