FGR imputa al fiscal de Morelos por el delito de tortura; Uriel ‘N’ permanecerá en el Altiplano hasta el martes 19

La Fiscalía General de la República (FGR) logró imputar el delito de tortura por autoría intelectual contra Uriel “N” en agravio de Luis Alberto Ibarra Ramírez alias “El Diablo” a quien detuvo en abril pasado por el homicidio y feminicidio de tres jóvenes del Instituto Nacional de Salud (INSP).

Por lo que la FGR ha solicitado la prisión preventiva justificada pero falta que el juez determine si lo vincula a proceso.

La próxima audiencia del fiscal Uriel “N” ahora por el delito de tortura en agravio de Luis Alberto Ibarra “El Diablo” será el martes 19, mientras seguirá en el Altiplano.

En varias de las intervenciones que tuvo, dijo desconocer a los involucrados, como un tal Erick alias “Criminal”.

Y su defensa insistió en pedir la nulidad de la audiencia porque la FGR no tendría que intervenir; pero esta dependencia insistió que existen vicios por parte de la Fiscalía Anticorrupción y la FGE entre esos el bloqueo institucional y la pérdida de una carpeta de investigación.

Y además la defensa insistieron en la protección del fuero, aunque ya la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se pronunció al respecto.

En las oportunidades que se le brindó a Uriel “N” para defenderse a través de la pantalla, Uriel “N” pidió ser trasladado a los juzgados de Atlacholoaya para poder defenderse ante la imputación que pretende la FGR imponerle por el delito de tortura, aunado a que no tiene los códigos y el internet tiene muchas fallas.

Esto después de que dicha dependencia le leyó el hecho en el que incurrió durante la detención de Luis Alberto Ibarra alias “El Diablo” en abril pasado.

Uriel “N” dijo desconocer a los supuestos criminales que Luis Alberto Ibarra “N” alias El Diablo, señaló que tenían supuesta complicidad con él para obtener su declaración a través de la tortura.

Por tanto, Uriel se quedará en prisión hasta el próximo martes 19. Entre los detalles la audiencia estuvo un tanto accidentada por el extravío de una de las carpetas de investigación, así como también los asesores jurídicos no contaban con ellas para una adecuada defensa.