En medio de la marcha por el 8 de marzo en Cuernavaca, colectivos de mujeres de los denominados “separatistas” comenzaron a realizar destrozos en edificios públicos y privados, sin embargo al llegar a la sede del Ejecutivo estatal, rompieron vidrios y prendieron fuego al vestíbulo de Palacio de Gobierno, aunado a las pintas, en muros y ventanas.
“Nos queremos libres y queremos caminar sin miedo”, fueron algunas de las consignas plasmadas en las cartulinas que portaban las manifestantes.
Cientos de mujeres partieron desde la zona de la colonia La Carolina hasta la Plaza de Armas de la capital morelense, con batucada, pancartas, lonas, cartulinas en las que se leían consignas para frenar la violencia feminicida. Algunas llevaban a sus bebés y otras más a sus perros.
“Si no hay justicia para nosotras, que no haya paz para el gobierno”, vitoreaban.
Pero también mostraban fotos de hombres acusados de violación o acoso, sin embargo mientras realizaban pintas y prendieron fuego en las oficinas principales del Palacio de Gobierno, el humo provocó que algunas de las asistentes se pusieran mal, pues comenzaron a sofocarse.
Por lo que solicitaron el apoyo de paramédicos, debido a que algunas de las integrantes del contingente, inhalaron el humo y el olor de la pintura, una más fue alcanzada por las llamas. De inmediato se acercaron elementos de Protección Civil para apagar el fuego de las oficinas.
En esta ocasión, también se realizó un pronunciamiento para proteger el derecho a la libertad de expresión a las mujeres periodistas, comunicadoras y locutoras y, que deje de ser un oficio precario; aunado a que hicieron un llamado los dueños de estos, para que brinden mejores condiciones laborales.
“Demandamos que se abra el diálogo directo, para garantizar el derecho de las mujeres periodistas a informar”, señalaron durante el mitin en la Plaza de Armas.
Además, instalaron el muro de la vergüenza para denunciar a violadores, así como también a deudores alimenticios.