El presidente municipal de Amacuzac, Ramiro Iturbe advirtió que si el Estado no le refuerza la seguridad a él y su familia, está dispuesto a renunciar al cargo, pues confirmó que sigue recibiendo amenazas del crimen organizado.
Señaló que el dicho municipio del sur de Morelos, persiste la operación y disputa de la plaza por miembros del crimen organizado y únicamente se cuenta con 11 policías, los cuales no son suficientes para atender a los ciudadanos.
“Me voy a entrevistar con el de la Guardia Nacional, el lunes o martes; son 11 policías municipales y del Estado 16, se necesitan unos 30 y por lo menos algunos de la Guardia Nacional, cuando yo asumí el cargo me aseguraron que me iban a reforzar y nada”, expresó el edil.
Lo anterior tras el enfrentamiento que se registró la semana pasada entre presuntos sicarios y elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que dejó dos presuntos delincuentes muertos; así como el caso de una mujer que fue asesinada a balazos en esta demarcación.
“Me han dicho qué hay muy pocos (elementos) de la Guardia Nacional, que estaban esperando desde diciembre más elementos pero no han llegado; he recibido (amenazas) todos los días, pero sólo tengo un elemento de guardia”, reiteró.
Mencionó que cuando tomó el cargo, el secretario de Gobierno, Pablo Ojeda le afirmó que reforzarían su seguridad y la de su familia pero hasta el momento, no se ha hecho, a pesar de que fue una condición para ocupar el lugar. Agregó que si bien, él tiene el compromiso de atender y mejorar su municipio sí existe angustia por su integridad.
“Sí, lo he pensado (dejar el cargo) y más mi familia me lo ha pedido; en diciembre me quemaron mi auto, el viernes pasado personas rondaron en tres motos, se quisieron meter por abajo pero no lo lograron, llamamos a seguridad pero llegaron tarde y ya se habían ido, por eso me reuniré con el de la Guardia Nacional”, concluyó.
