Alumnos de la Normal de Ayotzinapa vandalizan oficinas del Congreso de Guerrero

Por: Rosario García Orozco

Chilpancingo, Gro., 17 de julio del 2020.- Estudiantes de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa incendiaron la caseta de vigilancia y ventanales de oficinas administrativas del Congreso local, con el uso colchones bañados con gasolina, además de que lanzaron petardos.

Los manifestantes llegaron al edificio legislativo a bordo de seis autobuses de pasajeros de empresas comerciales estacionados en el punto conocido como trébol sur.

Los normalistas bajaron de algunas camionetas, con logotipos de la Normal de Ayotzinapa, colchones que rociaron con gasolina.

Los colchones fueron colocados en los ventanales de oficinas administrativas y la entrada al edificio donde se encuentran los cubículos de los diputados.

Tomaron sus precauciones, y para no exponerse a ser alcanzado por el fuego, les lanzaron petardos para prenderlos a distancia, lo que generó temor entre los dueños y trabajadores de los negocios cercanos.

Además, a la cabina de vigilancia, ubicada a la entrada del estacionamiento le lanzaron bombas molotov, lo que generó un incendio más grande y se quemó todo lo que había dentro de ese espacio.

Al retirarse los manifestantes, elementos de seguridad del congreso local inició con las tareas para sofocar los incendios con extintores colocados en el mismo edificio legislativo.

Más tarde, arribaron elementos de bomberos del gobierno del estado y del ayuntamiento de Chilpancingo, cabe destacar que fue evidente que la manguera de un carro-bomba de Bomberos del municipio se encontraba con una ruptura que la mantiene completamente inútil para una labor de emergencia.

En la movilización, junto con los normalistas de Ayotzinapa participaron integrantes de la Federación de Estudiantes Socialistas Campesinos de México (FECSM).

Los normalistas gritaron consignas para acusar al Gobierno de la República de utilizar la identificación de los restos de Chiristian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 estudiantes desaparecidos desde septiembre del 2014, como una cortina de humo, ante el manejo inadecuado de la pandemia del Covid-19, además reclamaron que no hay estrategia para contener la caída de la economía y el nulo avance en materia de seguridad para reducir la impunidad con la que opera el crimen organizado.

Insistieron en una investigación precisa en torno a la agresión que sufrió en febrero pasado, la «Caravana del sur en busca de los 43» en el estado de Chiapas, el estudiante del primer grado, Juan Antonio Flores García quien se mantiene hospitalizado por una fractura en el cráneo.

Al respecto, el gobernador Héctor Astudillo Flores reprobó los actos de los estudiantes, los que calificó como no agradables y confió en no “volver a ver este tipo de actos de violencia”. Pero se dijo de acuerdo en que en el caso de Ayotzinapa “no haya perdón, ni olvido”, a través una investigación clara sobre los hechos.

Hasta el momento no se reporta ningún lesionado por el incendio de este viernes en el Congreso Local.