Por: Vero Bacaz
En mi etapa como universitaria, estaba obsesionada con la moda, bolsas, zapatos, cinturones, carteras, chamarras, etc. Algo normal en una joven de 23 a 28 años, que comienza sus estudios profesionales y gusta verse bien al asistir a la universidad, pero además no era la única, mis compañeras Yahara, Tere y Kenya, compartíamos la misma obsesión.
En ese entonces (2001-2005), estaban de moda los pantalones acampanados, las bolsitas de colores, las plataformas de madera, collares, cinturones de colores, lentes neon, aretotes; entonces, a pesar de que trabajaba en un cine, el sueldo que obtenía por 3 a 8 horas de trabajo, en horarios quebrados en los que llegábamos a salir pasada la media noche, no me alcanzaba para esos pequeños gustos, lo que ganaba se me iba en pasajes.
Entonces, decidí convertirme en una ‘Neni’ y vender bolsas, por esa época el punto de reunión era la Plaza Cinemex Diana, el Sumesa de avenida San Diego o en Chedraui, este último sigue formando parte de los sitios de encuentro “seguros” para las Nenis y sus clientas.
Era una especie de terapia, para mi, porque el acudir a los comercios de la Ciudad de México, sí, en Tepito, el Mercado de Granaditas y todos esos lúgubres puntos de mayoreo de la capital mexicana, donde cientos de personas acuden a surtirse de mercancía, me servía como terapia.
Era una sensación de gozo, de lujuría, el poder adquirir las bolsas, las carteras, los cinturones de mi agrado, sentía de momento que me lo estaba comprando para mi, pues se manifestaba en mí ese sentimiento que se origina al saber que una está estrenando, pero después venía mi gran reto, venderlo.
Solo así pude tomar el control de mi compulsión por comprar, comprar, comprar, pues ahora la ventaja, es que estaba ganando un dinero extra, a lo que me pagaban en el cine, eso sí fue una buena terapia.
Por eso hoy, me causa un poco de enojo que las tribus –recalcitrantes- en las redes sociales, busquen menospreciar y desdeñar el esfuerzo que miles de mujeres hacen a diario para salir adelante, para ser la primera o la segunda fuerza económica en sus hogares, muchas, sí, como yo, madres solteras, ‘las luchonas’, las que nos gusta la música de Jenny Rivera, las que tenemos el hermoso reto de ser mamás y también las que no lo son.
Por eso, a partir de este mes, las Nenis, las Queens Power, las Wonder Woman y todas aquellas mujeres emprendedoras que todos los días, se fletan anunciando sus productos, su mercancía, sus servicios y hacen diversas estrategias en redes sociales para vender y cuyo punto de reunión para hacer sus entregas, son el Mc Donalds del Centro, La Plazuela del Zacate, el Camellón de Plaza Cuernavaca, Chedraui de Jacarandas y demás sitios, tienen un espacio para publicitarse en este portal por un precio económico, en reconocimiento a su valentía y esfuerzo.
Y sí, los informes son “inbox” para poder ajustarnos a su presupuesto, pues estamos conscientes de la situación económica del país que ha causado la pandemia de COVID-19; que el invertir en mercancía, conlleva un gran esfuerzo y de poner todos su ahorros, algunas viajan hasta Guadalajara, incluso el extranjero, para traer lo más ‘chic’ y que quieran o no, son una fuerza de trabajo que sostienen la economía cada quincena, de este estado y del país.
Las Nenis existen desde hace mucho, pero no faltó quien buscó ridiculizarlas y en tono burlón a manera de escarnio hacían memes y publicaban ataques a su labor, ya sea en sus muros de Facebook, Instagram y Twitter. De hecho, no faltó quien las citó con la promesa de una compra segura y las citó, para robarles.
También no pudo faltar, quien por envidia reportó sus fan page, para que los mediadores de Facebook cerraran su página y así frenar sus ventas, esto provocaba incluso que perdieran a clientas frecuentes. Brenda Ortíz (de las primeras nenis que conocí), me comentó un día: no sé por qué me hacen eso, si el sol sale para todos.
No obstante, las clientas buenas, las que quedan satisfechas siempre vuelven y como yo, que cuando algo me gusta me aferro y si no lo encuentro las localizo hasta debajo de las piedras, así lo harán. Ya sea en sus grupos de WhastApp, de Facebook o Instagram.
Por eso hoy, Presente Morelos abre el #EspacioNenis y lo inaugura con mis grandes acreedoras y que obviamente cuando necesito un regalo y ando corta de plata, ahí están para salvarme, -incluso si es un obsequio para hombre- aquí se las presento: mi madre la Neni ‘number one’ en mi vida, Laura Rojas que vende productos de L`BEL, CYZONE, Esika y que realmente lo hace por hobbie y porque son de excelente calidad.
Chávez Lilian Iracema o Azul Chávez con su marca ‘Fashion Blue’ que trae ropa, zapatos y accesorios de importación; Karina Granja con ‘La bodeguita de Lyz’ mi gran proveedora de bolsas y carteras; no puede faltar mi amigocha “Mary Ventas”, que me trae lo mejor desde el gabacho y Natalie García que ofrece los mejores productos para el rostro, desde maquillajes, mascarillas, limpia brochas y qué creen, me trajo a mi hermoso Logan, mi beagle, el lomito que soñé, después de que falleció mi Lucas y qué creen…en pagos. No me juzguen si lo compré, pero hoy es el consentido de casa y hemos adoptado uno callejero para compensar esa compra.